ISLAMABAD, 10 de mayo de 2025 — Las tensiones entre Pakistán e India alcanzaron un nuevo punto crítico tras el inicio de una ofensiva militar pakistaní a gran escala, denominada "Operación Bunyanun Marsoos", una frase en árabe que se traduce como "estructura de concreto", en alusión a su carácter firme y contundente. Según fuentes oficiales en Islamabad, la operación fue lanzada en respuesta a una serie de provocaciones continuas atribuidas al gobierno indio.
Autoridades pakistaníes informaron que múltiples objetivos estratégicos en territorio indio están siendo atacados de forma simultánea como parte de esta campaña coordinada. Uno de los primeros blancos confirmados ha sido una instalación de almacenamiento de misiles BrahMos ubicada en la ciudad de Beas, en el estado indio de Punyab, la cual habría sido completamente destruida durante el ataque inicial.
El portavoz militar pakistaní no ofreció detalles sobre la magnitud de la ofensiva ni el número total de objetivos involucrados, pero afirmó que se trata de una "respuesta necesaria y proporcional ante las constantes acciones hostiles por parte de Nueva Delhi". La declaración sugiere que la operación no sería un hecho aislado, sino parte de una estrategia militar más amplia.
Por su parte, el gobierno de la India aún no ha emitido una respuesta oficial, aunque fuentes extraoficiales han reconocido movimientos inusuales en la frontera y un aumento en los niveles de alerta en diversas bases militares. La comunidad internacional observa con creciente preocupación este nuevo episodio en una de las regiones más volátiles del planeta.
Un conflicto con raíces profundas
Las hostilidades entre India y Pakistán se remontan a la partición de 1947, cuando ambos países se separaron del dominio británico en medio de un conflicto violento y masivo desplazamiento de población. Desde entonces, han librado tres guerras importantes y múltiples enfrentamientos menores, muchos de ellos centrados en la región disputada de Cachemira.
Este nuevo episodio de violencia se enmarca en un contexto geopolítico delicado, con ambas naciones equipadas con arsenales nucleares y una larga historia de desconfianza mutua. La reciente ofensiva pakistaní ocurre tras semanas de acusaciones cruzadas, ejercicios militares y denuncias de incursiones transfronterizas, lo que ha alimentado la percepción de que una confrontación directa era inminente.
Impacto regional y posibles escenarios
El ataque a un sitio clave como el almacén de misiles BrahMos —uno de los sistemas de misiles supersónicos más avanzados de la India— envía una señal clara del alcance y la precisión de la ofensiva pakistaní, lo que podría desencadenar una respuesta militar por parte de Nueva Delhi en las próximas horas.
Expertos en seguridad internacional advierten que una escalada sin mediación podría desestabilizar no solo el Asia Meridional, sino también afectar intereses estratégicos de potencias como China, Estados Unidos y Rusia, que mantienen alianzas o vínculos económicos con ambos países. Además, el conflicto amenaza con impactar rutas comerciales críticas y mercados energéticos.
A medida que se desarrollen los acontecimientos, el riesgo de un conflicto a gran escala entre dos potencias nucleares mantiene en vilo tanto a los países vecinos como a los organismos multilaterales, que ya están comenzando a llamar al diálogo y la desescalada inmediata.
