Washington, 21 de junio de 2025 — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este sábado una ofensiva aérea contra tres instalaciones nucleares clave en Irán: Fordow, Natanz e Isfahan. La acción militar, considerada una de las más agresivas en el contexto del conflicto con Teherán, representa una escalada directa en la tensión regional.
A través de su cuenta en Truth Social, Trump aseguró que todos los aviones estadounidenses regresaron sin incidentes y que se lanzó “una carga completa de bombas sobre la instalación principal, Fordow”. Añadió además que Irán debe aceptar “poner fin a esta guerra”, dejando clara su intención de presionar al régimen iraní hacia un nuevo proceso de negociación.
Irán confirma los ataques y advierte represalias
La agencia estatal iraní IRNA reconoció los bombardeos, mientras que un comentarista de la televisión oficial lanzó una dura advertencia: “Ustedes la iniciaron y nosotros la terminaremos”. Esta declaración, difundida por CNN, sugiere una posible respuesta militar por parte de Teherán, lo que eleva la preocupación sobre un nuevo frente de conflicto abierto en Medio Oriente.
EE. UU. niega intención de cambio de régimen y busca negociar
Según CBS News, Estados Unidos ya habría establecido contactos diplomáticos con Irán para transmitir que los ataques forman parte de sus planes estratégicos, pero sin intención de un cambio de régimen. Fuentes cercanas a la Casa Blanca afirmaron que el presidente Trump no contempla más acciones ofensivas por ahora, aunque mantiene la presión con el objetivo de llevar a Irán de vuelta a la mesa de negociaciones.
Una intervención directa en apoyo a Israel
La ofensiva se produce nueve días después de que Israel lanzara ataques contra territorio iraní el pasado 13 de junio. Medios estadounidenses indican que esta acción marca la entrada directa de Estados Unidos en apoyo del intento israelí por desmantelar el programa nuclear de Irán, lo que ha sido interpretado como una escalada histórica en la región.
Expertos señalan que esta operación podría desencadenar represalias contra tropas estadounidenses desplegadas en Irak, Siria y otros puntos estratégicos del Golfo Pérsico, lo que pone en alerta máxima a las fuerzas de defensa regionales.
Trump busca definir el futuro inmediato con Irán
El presidente Trump había anticipado el jueves que tomaría una decisión “en las próximas dos semanas” para dar a Irán una última oportunidad de negociar. El ataque de este sábado parece formar parte de ese mensaje de fuerza y determinación, con el objetivo de reposicionar a Estados Unidos como actor dominante en las negociaciones nucleares.
La comunidad internacional observa con preocupación esta nueva fase del conflicto entre Washington y Teherán, mientras aumentan los temores de una confrontación a gran escala en Medio Oriente.
